El P-LIB deplora el acuerdo de fusión alcanzado entre Caja España y Caja Duero, que creará la séptima mayor caja de ahorros de España. Este nuevo monstruo financiero nace, como las demás cajas procedentes de fusiones, con el vicio de origen de sus constituyentes: entidades bancarias privilegiadas que basan su negocio en la competencia desleal a la banca normal, que son ajenas al control accionarial y que están gobernadas por extraños órganos corporativos altamente politizados y propios de una «democracia orgánica» y no de un sistema económico y político moderno. El P-LIB reitera su revindicación respecto a las cajas de ahorros: privatización mediante ofertas públicas de venta con trato preferente a los actuales empleados y depositantes; y reconversión en bancos normales.
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