El Pacto de Estado por la Educación que hoy presenta el ministro Gabilondo ni aporta grandes novedades ni soluciona los males que aquejan a nuestro sistema educativo. Esos males, a juicio del Partido de la Libertad Individual (P-LIB) son principalmente la baja calidad de la educación y la falta de libertad en el ejercicio del derecho a la misma.
El P-LIB, frente a la posición común de todos los partidos colectivistas, propone una reforma total del sistema educativo, basada en su completa desestatalización y en su devolución a la sociedad civil, con un sistema de cheque escolar que garantice el acceso universal a un servicio tan básico sin establecer la actual discriminación entre colegios estatales y privados. El P-LIB anhela un mercado plural y competitivo en el que las familias puedan encontrar la oferta educativa que prefieran, dentro de unos parámetros generales amplios. Sin ese carácter competitivo del sector, nunca alcanzaremos la excelencia que la educación necesita.
El P-LIB denuncia que ninguno de los partidos políticos principales quiere abordar la privatización con garantías de universalidad, y siguen aferrándose al modelo actual de educación colonizada por el Estado, burocratizada y masificada, incapaz de satisfacer realmente las necesidades de la ciudadanía.