El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) se opone a la resolución aprobada esta semana por el Parlamento Europeo, en la que pide al Banco Central Europeo la compra masiva de bonos de deuda pública de los Estados miembros, según ellos para facilitar así la recuperación económica en el continente. La medida pretende emular la estrategia de «quantitative easing» de la Reserva Federal estadounidense. Para el P-LIB, esta medida ni favorece la creación de riqueza ni aumenta la confianza en la economía europea, simplemente cambia de manos la deuda estatal, pero siempre dentro del aparato público.
Para el presidente del P-LIB, Juan Pina, «la deuda soberana se ha convertido prácticamente en un activo tóxico y los Estados tienen muchas dificultades para seguirla colocando porque los inversores no se arriesgan fácilmente a comprarlo». «La situación ha llegado a este punto a causa de la falsificación de la economía por los Estados y por sus organismos internacionales, y no saldremos de la crisis con brujería ni con aparatosas operaciones que buscan maquillar las cifras, sino con unos planes de austeridad sin precedentes que permitan sentar las bases de una reforma completa del sistema económico, que necesariamente debe incluir un valor seguro y objetivo del dinero y una sujeción de todos a normas que impidan alterar y hacer artificial la economía», ha añadido, concluyendo que «mejor haría el Parlamento Europeo en pedir la desaparición del sistema de banca central y la transición hacia un sistema de libre emisión de moneda fehacientemente respaldada, dentro de un sistema de encaje bancario pleno que impida la adulteración de la economía mediante la expansión crediticia irresponsable».