El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) considera que el debate de política social realizado hoy en el Congreso de los Diputados no ha aportado información nueva a los ciudadanos, ni mucho menos soluciones a los problemas que hoy tiene la ciudadanía. El PSOE, el PP y los demás partidos una vez más han hecho alarde de sus vías diferentes hacia el colectivismo que todos comparten. Ninguno de ellos se atreve a poner sobre la mesa la necesidad de reducir drásticamente el peso del Estado y permitir que la sociedad gestione la mayor parte de lo que, bajo el nombre de «política social», hacen hoy las administraciones públicas a todos los niveles territoriales. Ninguno de los dos grandes partidos ni tampoco los nacionalistas han sido capaces de concretar medidas que devuelvan a la sociedad civil el control de servicios tan esenciales como el sanitario, el educativo o las pensiones y prestaciones por desempleo u otras contingencias. La libre y espontánea acción de miles de empresas (y de entidades no lucrativas) compitiendo entre sí es mucho más eficaz que el Estado a la hora de atender las necesidades de la población, e incluso a la hora de gestionar la solidaridad y evitar la exclusión. El debate de hoy se enmarca en la precampaña electoral y en el turnismo de un sistema de partidos que cada día se asemeja más a un sistema de partido único bicéfalo. El PP es incapaz de plantear alternativas dentro del sistema porque lo que realmente reclaman la sociedad y la realidad es una alternativa sistémica. La única corriente de pensamiento que ofrece esa alternativa sin recurrir a nuevas formas de totalitarismo sino, precisamente, devolviendo el poder, la soberanía y la libertad a las personas, es el liberalismo más avanzado y libertario.