El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) celebra la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que ha declarado ilegal una disposición autonómica catalana que limitaba la concesión de nuevas licencias para centros comerciales a las «comarcas en las que la oferta comercial existente no se considere excesiva». La jurisprudencia creada por la decisión del alto tribunal con sede en Luxemburgo es de aplicación en todas las demás comunidades.
Luis Espinosa Goded, Secretario de Relaciones Institucionales del P-LIB ha declarado su satisfacción por este «avance hacia la libertad de apertura de centros comerciales, que permite a los consumidores decidir si quieren o no comprar en esos establecimientos en lugar de trasladar la decisión al político de turno, como si éste tuviera derecho a imponer dónde –o incluso qué cosas– deben comprar los ciudadanos». «La batalla por la libertad de horarios comerciales –ha declarado– es una de las más importantes para los derechos del consumidor y para una sociedad libre: es inadmisible que sean los poderes públicos quienes decidan cuándo se puede o no comprar, condicionando la vida y la capacidad de elección de los ciudadanos, que es muy probable que quieran realizar sus compras de noche o en domingos y festivos». «Estas medidas prohibicionistas –concluye Espinosa– a quienes más perjudican es a las familias de trabajadores, a las que se les hace muy difícil ir a comprar entre semana y se les prohíbe hacerlo los domingos o en horarios extendidos».
El P-LIB comprende las demandas de los trabajadores del comercio, a los que, por supuesto, no se les puede obligar a realizar horarios extendidos o superiores a los legalmente establecidos, y considera encomiable la labor de los comerciantes que con tanto esfuerzo sacan adelante sus pequeños establecimientos, pero considera que ello no les faculta para exigir el cierre de otros comercios. Los pequeños comerciantes deben competir en libertad para ofrecer los mejores servicios, como llevan décadas haciendo con profesionalidad y cercanía a sus clientes.
