A juicio del Partido de la Libertad Individual (P-LIB), el nuevo reglamento de armas aprobado por el gobierno supone una mayor restricción al libre comercio de armas legales entre particulares, ya que, entre otras medidas, a partir de ahora se exigirá la previa autorización de la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil. Por otro lado, con este reglamento se pierde una magnifica oportunidad de atender las demandas de los tiradores deportivos. El Vicepresidente tercero del P-LIB, Álvaro Chena, ha declarado que “este reglamento es un paso más del Estado en el incesante intento de restringir cuanto sea posible la tenencia legal y el legítimo uso de armas en España». Chena ha exigido que los políticos «dejen de tratar a los ciudadanos como a niños pequeños o a potenciales criminales”.
El P-LIB recuerda que es el único partido político que apuesta por la libertad de armas en circunstancias normales. Sobre esta cuestión, el Programa Político Marco aprobado por el I Congreso dice lo siguiente: «Pensamos que los ciudadanos sin antecedentes penales tienen un derecho incuestionable a poseer armas para defenderse de posibles agresiones, y que nadie puede obligarles a delegar plenamente en el Estado esa defensa. Al mismo tiempo, es preciso mantener los registros de armas, los permisos de tenencia, los límites de magnitud y calibre y otros controles necesarios para evitar una proliferación indiscriminada y peligrosa de armas en la sociedad».