El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) ha ganado su recurso contencioso-electoral y aguarda ahora con la máxima expectación que sus candidaturas al Congreso de los Diputados y al Senado por la circunscripción de Madrid sean formalmente proclamadas.
El P-LIB considera que esta victoria judicial supone un golpe contundente al injusto y antidemocrático Veto Electoral impuesto por la casta política española mediante la reforma de la LOREG. El P-LIB ha logrado que quede establecido en sentencia firme e inapelable el principio de subsanabilidad de todos los defectos de forma de las candidaturas en el plazo de cuarenta y ocho horas que marca la ley, incluyendo el número de avales válidos, ya que para las formaciones políticas resulta imposible conocer de antemano el número de firmas incorrectas recogidas entre la ciudadanía. Estamos seguros de que esta sentencia histórica sienta una jurisprudencia básica para la salvaguarda del derecho fundamental e inalienable de todos los ciudadanos al sufragio activo y pasivo, y constituye un freno al ataque frontal que el pluralismo político está sufriendo en nuestro país. Con todo, seguimos denunciando la injusticia manifiesta del nuevo artículo 169.3 de la LOREG, lamentamos que infinidad de candidaturas hayan quedado excluidas y deseamos éxito a las acciones legales interpuestas por numerosas formaciones políticas contra el Veto Electoral.
Más allá del fallo judicial, extraordinariamente favorable, debemos resaltar los fundamentos de Derecho de la sentencia, en los que queda absolutamente patente que la resolución emitida el 20 de octubre por el Presidente de la Junta Electoral Central, por su cuenta y riesgo, sin mediar acuerdo de la misma, fue de todo punto injusta. Mediante esa resolución de la infamia, el presidente del máximo órgano electoral se permitió irrumpir en el proceso de subsanación, a la mitad del mismo, para ordenar a las juntas provinciales su interrupción, conculcando directamente los derechos fundamentales de cientos de candidatos en toda España, e indirectamente el derecho de sufragio de sus potenciales electores. La función de la Junta Electoral Central es, por encima de todo, velar por los derechos fundamentales. La resolución de la infamia, sin embargo, constituye un histérico abuso del poder que corresponde a esa alta magistratura, que actuó como cancerbera del establishment político español y no como garante máxima del Derecho electoral. La Justicia ha puesto esa resolución y a su emisor en el lugar que les corresponde, pero cabe ahora la duda de si todo el proceso de elecciones a Cortes Generales, que continuará tutelado y dirigido por ese mismo juez como presidente de la JEC, va a contar con las necesarias garantías jurídicas.
El P-LIB desea reconocer públicamente la extraordinaria dedicación y la brillante dirección jurídica de nuestro recurso por parte de nuestro Secretario General, Francisco Cacharro. El P-LIB se dispone ahora a planificar su campaña electoral en las circunscripciones de Madrid y Zaragoza, y convoca a ese titánico esfuerzo a todos su afiliados, simpatizantes y seguidores en toda España. Estamos en campaña y os necesitamos. Nuestro éxito, evidentemente, no se medirá en escaños, ni siquiera en votos, sino en el aprovechamiento de la campaña para dar a conocer nuestra alternativa frente al Hiperestado y para convencer al mayor número posible de ciudadanos de que LIBERTAD ES PROSPERIDAD.
Resolución de la infamia, que vulneró nuestros derechos y derribó injustamente nuestras candidaturas.
Recurso contencioso-electoral que presentó el P-LIB.
Sentencia que nos dio ayer la razón y estableció la clara injusticia de la resolución de la infamia.