El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) rechaza la paralización de las licitaciones relativas a los aeropuertos de Barcelona-El Prat y Madrid-Barajas por parte de la nueva ministra de Fomento, Ana Pastor, y teme que este sea el principio de una detención o reconsideración de la política de privatizaciones. Para el Presidente del P-LIB, Juan Pina, «no sería de extrañar que el ejecutivo conservador resultara menos favorable aún que el socialista a la privatización de empresas y servicios estatales, ya que esto guardaría relación con su voracidad fiscal y con las demás medidas colectivistas adoptadas en estas primeras semanas de gobierno, medidas que ya no sólo pasan por la izquierda al PSOE sino incluso a IU«. «Además, los motivos que esgrime la ministra no son de recibo: por supuesto que las condiciones del mercado no son las idóneas en plena crisis, pero precisamente por esa crisis es necesario deshacerse de las empresas públicas para generar ingresos extraordinarios con los que reducir el salvaje endeudamiento en el que ha incurrido el Estado«, ha añadido, para concluir que «algunos de los extraños argumentos de la ministra sobre la vertebración del territorio a través de la política aeroportuaria demuestran claramente que el PP, como los demás partidos del actual arco parlamentario, está decidido a utilizar la política de infraestructuras para hacer ingeniería social, en este caso mediante los hubs de tráfico aéreo, los cuales deberían surgir, desarrollarse y desaparecer de forma completamente espontánea y al margen de los políticos de cualquier signo». La ministra Pastor ha defendido el uso de los aeropuertos como una forma de «modular la generación de ingresos para el Estado», cosa que a juicio del P-LIB constituye un error porque el Estado no tiene que meterse en el negocio privado de los aeropuertos. El P-LIB reclama la privatización de El Prat y de Barajas, así como del resto de aeropuertos hoy propiedad de AENA.