El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) canario se opone totalmente a la subida de impuestos perpetrada por el Consejo de Gobierno del archipiélago la pasada semana. Esta subida incluye el paso del IGIC (Impuesto General Indirecto Canario), equivalente al IVA peninsular, de un 5% a un 7%, lo que supone un incremento de un 40% de forma repentina, pasándose a gravar consumos que antes disfrutaban de bonificaciones fiscales como el consumo de telefonía fija y móvil. También se anuncian más impuestos para el combustible y la creación de nuevos tributos y tasas. Además, impuestos que supuestamente se habían suprimido por ser anácronicos, como el de Sucesiones y Donaciones, se recuperan con la renovada voracidad fiscal del gobierno. Esto supondrá un duro golpe para las economías domésticas y empresariales, que verán incrementadas de la noche a la mañana sus facturas por productos y servicios de los que no se puede prescindir fácilmente, como son las comunicaciones y el transporte.
Consideramos especialmente grave la medida ya que la espectacular subida de impuestos no va acompañada de un proporcional recorte del gasto, sino que éste se limita a un retoque meramente estético y no estructural, con un recorte del 5% del sueldo de los funcionarios, la supresión de dos agencias y la concentración de tres organismos públicos que, por lo visto, ya no resultan tan necesarios como cuando se crearon por triplicado.
El P-LIB echa en falta reformas estructurales que reduzcan el elevadísimo gasto de las administraciones canarias, con infinidad de empresas públicas deficitarias y decenas de organismos inútiles como la Televisión Autonómica Canaria, o que sólo sirven para colocar “personal de confianza”.
Ignacio M. García Medina, Coordinador del P-LIB en Canarias afirma que “la gravedad de estas medidas es extrema, no sólo por subir de repente un 40% los impuestos al consumo de productos y servicios con demandas relativamente inelásticas, sino por la forma en la que se han aprobado: un sábado de clásico entre el Barcelona y Real Madrid y echándole la culpa a los recortes presupuestarios impuestos por el gobierno central”. Para García Medina, “el gobierno canario intenta confundir una vez más a los ciudadanos tratando de relacionar esta dolorosa subida con los recortes del PP, para no asumir así la culpa que también le corresponde, tras varias legislaturas de gasto desenfrenado y desempleo disparado”.
