El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) extremeño rechaza frontalmente la intención del Ayuntamiento de Cáceres de incrementar en un 50% el IBI de las viviendas desocupadas, por el simple hecho de estarlo. La nueva medida tiene afán recaudador y una obvia carga ideológica, ya que se orienta a obligar a los propietarios a alquilar esos inmuebles. Gonzalo Ruiz, Coordinador del P-LIB en Extremadura, ha declarado que “nos encontramos ante un nuevo ataque a la propiedad privada por parte de quienes se consideran legitimados para distorsionarla en virtud de una pretendida función social de la misma, fundamentada en prejuicios ideológicos o místicos”.“El propietario de una vivienda no tiene por qué darle explicaciones a ningún gobierno, sea estatal o municipal, sobre el uso que hace de la misma”, ha afirmado, añadiendo que “en Extremadura hemos pasado del caciquismo de los marqueses al de los alcaldes, pero la desprotección del individuo es la misma”.
Los liberales creemos que el Ayuntamiento de Cáceres actúa con irresponsabilidad al forzar una saturación aún mayor del parque de viviendas ofertadas en alquiler. Lo único que le interesa es recaudar más y apuntarse un tanto en sensibilidad social mal entendida. El P-LIB expresa su preocupación por los criterios que pueda emplear el Ayuntamiento para determinar qué es exactamente una vivienda desocupada, ya que, por ejemplo, puede estarlo por falta de demanda específica derivada de la zona, del precio legítimamente solicitado o de cualquier otro factor. Penalizar con un 50% de impuesto adicional a quienes no se avengan a malbaratar el alquiler de su propiedad es una medida de intervencionismo ciego y autoritario que resulta impropia de un país libre.