El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) expresa su absoluto rechazo al sistema Puerta a Puerta de recogida de basuras, impulsado por Bildu en los ayuntamientos guipuzcoanos que gobierna. No se trata sólo de un sistema sucio, caro (cuesta tres veces más que el sistema de contenedores) e ineficiente (el 30% de lo recogido ni es reciclable ni compostable); ni de los perjuicios económicos por la no construcción de una incineradora de última generación. Se trata sobre todo del alcance de un sistema que va más allá de la mera discusión técnica o medioambiental, fuera de cuyo ámbito nunca debería haber salido. Es un proyecto de ingeniería social típico de los partidos colectivistas, pero Bildu se ha atrevido a dar un paso más, obligando a la población, con la excusa de la protección medioambiental, a amoldar sus costumbres y horarios personales a un arbitrario sistema de recogida selectiva asignada a días y horas concretos, condicionando gravemente su vida cotidiana, en un auténtico ejercicio de uniformización social, por no hablar del atentado que supone exponer la privacidad personal e identificada, ante cualquier tipo de intromisión particular o estatal.
Esta medida incalificable ha provocado el rechazo del resto de partidos políticos con representación, pese a que no han dudado en utilizar mecanismos similares en el ámbito del transporte, en la política agropecuaria, en la planificación industrial, en el modelo cultural o lingüístico, etc. cuando han gobernado. Incluso ha cosechado la oposición frontal de buena parte de los propios votantes de la izquierda abertzale, generalmente acríticos y seguidistas ciegos de las políticas que les marcan sus dirigentes. El aumento paulatino del rechazo a este sistema ha propiciado, incluso, la marcha atrás del mismo en varios municipios gobernados por Bildu, ante la movilización social generada.
El Coordinador Provincial del P-LIB guipuzcoano, Endika Elosegi, ha declarado que “este creciente rechazo es motivo de optimismo para los liberales guipuzcoanos, porque los individuos se están rebelando contra las políticas coercitivas de los gobernantes». «En esta tierra los socialistas de todos los partidos, en palabras de Hayek, llevan décadas moldeando a la población y adaptándola a sus diversos modelos, todos ellos dentro del colectivismo», ha afirmado, señalando que «esta rebelión frente al sistema Puerta a Puerta abre una brecha y destapa la realidad de un sistema en el que la casta política nos usa como meras piezas en su planificación, sin el menor respeto a nuestra voluntad ni a nuestra privacidad».