El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) de Andalucía observa con inquietud el bando municipal firmado el pasado mes de septiembre por la alcaldesa de Fuengirola (del Partido Popular), referente a las Fiestas y Feria del Rosario 2013. Resulta asombroso que un bando municipal de esas características tenga una extensión nada menos que de siete páginas, pero más asombroso aún resulta que entre a regular el formato de suministro de las bebidas alcohólicas, que será —según el bando— de un máximo de treinta y tres centilitros, excepto el “mojito” y la “caipirinha”, cuyo tamaño amplía la alcaldesa hasta los cincuenta centilitros.
En cuanto a la “ambientación musical”, el bando autoriza todo tipo de música interpretada en español pero prohíbe explícitamente los siguientes géneros: funk, rap, reggaetón, electrónica, metal, alternativa, hip hop, reggae, heavy metal, country, punk, gótica, y ritmos latinos en general. Recordemos que hace unos meses el régimen castrista prohibió la difusión de reggaetón en las cafeterías del Estado y de los particulares, el transporte público y los espacios públicos en general.
El Coordinador autonómico del P-LIB en Andalucía, José Antonio Peña, ha declarado hoy en Sevilla que «resulta inadmisible que el poder político encorsete hasta este grado la celebración de unas fiestas por parte de los ciudadanos mediante normas totalizadoras que regulan aspectos como que la decoración exterior e interior de las casetas sea realizada con motivos andaluces». “La ingeniería cultural, y social en general, a la que se ve sometida la ciudadanía ya es prácticamente insoportable, acompañada además de un generoso aparato de infracciones y sanciones, algunas de ellas inexplicablemente duras”, ha concluido Peña.