El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) expresa su preocupación ante la noticia, aparecida en diversos medios de comunicación, que parece evidenciar la existencia de una práctica habitual presuntamente delictiva (y contraria en cualquier caso a la ética más elemental) por parte de las autoridades tributarias españolas y concretamente de la Unidad de Delitos Económicos y Fiscales (UDEF). Esta práctica consistiría presuntamente en sobornar a directivos bancarios que trabajan en los países y territorios de baja tributación, lo que posiblemente se haría con cargo a los fondos reservados. De esta manera se compraría ilegalmente información sobre las cuentas y operaciones de ciudadanos españoles en los mal llamados «paraísos fiscales», con cargo a nuestros impuestos e incumpliendo no sólo la legislación extranjera sino también la española.
De ser cierta la información periodística, estaríamos ante la utilización delictiva de dinero público, y ante una persecución desaforada a los contribuyentes. El P-LIB exige una investigación sobre la realidad y el alcance de esta práctica, y reitera su propuesta de limitar la tributación a los hechos imponibles ocurridos en territorio español, por lo que promueve la abolición del régimen fiscal de «rentas universales». Defendemos el derecho de todas las personas físicas y jurídicas a trasladar a cualquier jurisdicción del mundo la riqueza legalmente obtenida, a no tributar a la Hacienda española por beneficios de cualquier tipo generados en otros países, a la plena privacidad financiera y a la legítima planificación fiscal internacional para originar el beneficio de sus operaciones en los países y territorios más ventajosos. Deploramos que la ocultación de dinero presuntamente procedente de delitos —en casos como los de Bárcenas o Pujol— se magnifique política y periodísticamente para desprestigiar al conjunto de los centros financieros de baja tributación y secreto bancario, y a los ciudadanos y empresas que los utilizan honradamente en su actividad financiera.
Los liberales libertarios deploramos una vez más que el gobierno español haya dado santuario en nuestro territorio al delincuente confeso Hervé Falciani, desoyendo las solicitudes de extradición de la Justicia suiza, y consideraría absolutamente intolerable que nuestras autoridades se dedicaran a corromper con nuestro dinero a empleados de banca de otros países. El Presidente del P-LIB, Juan Pina, ha declarado hoy que «más le valdría al Estado habilitar buenas normas de secreto bancario para atraer capital de todo el planeta, en vez de provocar la fuga del capital español». «Los refugios fiscales son un síntoma de la voracidad impositiva del Estado», ha añadido, resaltando que «si se acreditan los hechos aparecidos en la prensa, confirmándose que la UDEF soborna a bancarios de otros países, estamos ante un escándalo gravísimo». «Los países y territorios offshore y los bancos que allí operan tienen derecho a protegerse de estas prácticas por todos los medios, y tienen la obligación de proteger a sus clientes», ha recordado Juan Pina.