El Partido Libertario (P-LIB) de la Comunidad Valenciana expresa su preocupación y descontento al conocer los informes de la Interventora de la Generalitat Valenciana, que muestran irregularidades en centenares de contratos adjudicados por varias consellerias; y manifiesta su profundo rechazo y consternación ante las actuaciones de la Generalitat al margen de la ley. Los informes muestran como el fraccionamiento de contratos para evitar concursos públicos y las adjudicaciones a dedo forman parte del operar diario de la administración autonómica. Tan solo un año después de tomar el poder el Gobierno de PSOE, Compromís y Podemos, se pone de manifiesto que la regeneración política que tanto propugnaron no es más que corrupción con distinto signo político.
Desde que llegó al gobierno de la Generalitat Valenciana, el tripartito ha culpado a la herencia recibida de los males que acechan a nuestra Comunitat, por lo que era de esperar una regeneración profunda de la administración pública, orientada a eliminar los vicios de más de 20 años de gobiernos corruptos del Partido Popular. En lugar de eso, se ha dedicado a seguir la senda que marcaron los gobiernos anteriores en lo que a la corrupción se refiere, dilapidando el dinero de los valencianos y saltándose las leyes de contratación pública.
El P-LIB aboga por un cambio profundo en la Administración, simplificando y clarificando la contratación, con baremos claros y objetivos, haciéndola por tanto más cercana al ciudadano, y dotándola de mecanismos que impidan criterios subjetivos y discrecionales. Es en el control de la Administración Pública donde hay que incidir en mejorar leyes y reglamentos internos. Proponemos crear cordones sanitarios entre el dinero y los políticos. Queremos devolver cuantas competencias sea posible a la sociedad civil para conseguir una administración eficiente, con un coste mínimo para los ciudadanos.
El Coordinador del Comité Ejecutivo de la Comunidad Valenciana ha declarado que “mientras no minimicemos el sector público no tendremos una autonomía competitiva. Los ciudadanos debemos exigir criterios de eficiencia a nuestra administración, debemos pedirle claridad y honestidad”; y ha añadido que “el Estado debe ser un punto de encuentro que facilite las relaciones. Hoy solo tenemos un monstruo corrupto, sea quien sea el que gobierne. PSOE, Compromís y Podemos han tardado un año en demostrar que son parte del problema, no de la solución”.