El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) considera desastroso el nuevo zigzag del gobierno, que ayer mismo prohibió a los ayuntamientos aumentar la deuda municipal y hoy «recitifica» y les da un nuevo balón de oxígeno para que puedan seguir endeudándose irresponsablemente hasta el 31 de diciembre. El P-LIB exige la máxima austeridad a todas las administraciones públicas. Los ayuntamientos son responsables de una gran parte del gasto público y presentan situaciones de endeudamiento muchas veces extremas, como es el caso del Ayuntamiento de Madrid, cuya deuda compite con la de bastantes países en desarrollo, demostrando que el PP es con frecuencia tan despilfarrador e intervencionista como el PSOE. El P-LIB propone el establecimiento de topes constitucionales al nivel de endeudamiento de las administraciones públicas. La deuda que hoy contrae el Estado en nuestro nombre es una hipoteca al mañana de nuestra sociedad y afecta incluso a quienes hoy son menores o no han nacido. Por lo tanto el endeudamiento tiene que ser un instrumento excepcional y fuertemente controlado.
Con independencia del aplazamiento de la norma, el P-LIB entiende muy perjudicial para la economía española el continuo vaivén en las decisiones del gobierno, que demuestra una total ausencia de estrategia y de timón, sembrando una comprensible desconfianza en la acción frente a la crisis.