El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) condena con la máxima dureza y la más absoluta repulsa la repugnante huelga salvaje que se está desarrollando hoy en el Metro de Madrid.
Los ciudadanos de la capital están soportando atascos de tráfico monumentales y retrasos de hasta tres horas en sus trayectos habituales por culpa de la banda de gangsters sindicales que ha tomado literalmente las infraestructuras del Metro madrileño.
El P-LIB denuncia la connivencia de las autoridades de la Comunidad de Madrid, presidida por la sedicente liberal Esperanza Aguirre, con los sindicatos causantes de este caos. El gobierno regional no tiene excusa para no instar una contundente actuación de la fuerza pública en defensa de los trabajadores y usuarios de los servicios, agredidos y perjudicados por los piquetes criminales organizados por los sindicatos.
El P-LIB exige una profunda investigación de lo sucedido y la depuración de todas las responsabilidades políticas (en el Gobierno de la Comunidad de Madrid), gerenciales (en Metro de Madrid) y sobre todo penales (entre los instigadores de la sucesión de delitos que ha provocado el actual desastre). Naturalmente, los empleados que han violado consciente y voluntariamente la Ley al impedir el acceso de sus compañeros a los puestos de trabajo deben ser inmediatamente despedidos.