El Partido de la Libertad Individual (P-LIB), que en su reciente I Congreso aprobó una firme posición en contra de la ley anti-tabaco, constata que se ha producido una considerable pérdida de libertad en estos primeros días desde la entrada en vigor de las nuevas medidas de hostigamiento al fumador y a los propietarios de locales abiertos al público. El P-LIB reitera su oposición frontal a esta ley liberticida que convierte a los propietarios de bares, discotecas y restaurantes en policías al servicio del Estado. Las inspecciones realizadas estos días en varias comunidades y particularmente en la Valenciana, con elevadas multas a los hosteleros, constituyen un mal inicio de 2011 para la libertad.
El P-LIB alerta sobre el hecho de que la legislación española, con estas nuevas medidas, pasa a ser una de las más restrictivas del mundo (si no la más restrictiva) y abre el camino hacia la prohibición del tabaco incluso en todos los espacios abiertos, confinando a los fumadores a sus domicilios y preparando tal vez el terreno para la prohibición total de fumar. El P-LIB expresa su apoyo a las organizaciones de fumadores, a los empresarios agrícolas del tabaco, a los estanqueros y, desde luego, a los propietarios de locales abiertos al público, y llama a la sociedad civil a la resistencia por todos los medios legales frente al Estado policial que el gobierno quiere imponernos para obligarnos a estar sanos.