El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) considera que el copago sanitario implementado o considerado en diversas comunidades autónomas es el colmo de la desvergüenza por parte de un supuesto Estado del bienestar que ha fracasado estrepitosamente pero no renuncia a actuar como proveedor de servicios mucho mejor gestionados por la iniciativa privada. Los ciudadanos se ven físicamente obligados a pagar enormes porcentajes de sus ingresos al Estado con la excusa de que, a cambio, les ofrece servicios esenciales como la atención médica. La realidad es que esos servicios se proveen con grandes deficiencias (sobre todo de flexibilidad, comfort y rapidez) y a un precio superior al que costaría a los mismos ciudadanos un seguro privado equivalente. En estas circunstancias, exigir ahora que los contribuyentes deban además pagar de forma directa una parte de la atención resulta intolerable. El copago no es tal, es doble pago. Y la medida sólo pone un parche temporal al hundimiento de la sanidad estatalizada, equiparable al que se puso al sistema estatal de pensiones con el incremento de la edad de jubilación. Son medidas que pretenden extender la agonía del Hiperestado para aplazar su inevitable sustitución por servicios privados, limitándose el Estado a garantizar el universal acceso a los mismos mediante la simple distribución de cheques estrictamente a las personas cuyos recursos, objetivamente, no les permitan hacer frente al escaso coste de un seguro médico. El P-LIB, único partido que ha defendido el cheque sanitario en campaña, insta al nuevo gobierno conservador a no engañar a la población respecto a la sostenibilidad del sistema de salud y a iniciar la transición hacia su plena descolonización por parte del Estado, evitando entre tanto la injusticia de medidas como el copago, que obligan a las personas económicamente más débiles a un esfuerzo injusto, sobre todo teniendo en cuenta que la gran mayoría de esas personas podrían en cambio costearse los ochenta o cien euros de un buen seguro médico y aportar aún algo más para el sistema de cheques, mientras que el sistema actual les cuesta mucho más.