El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) expresa su rechazo a la nueva subida de la tarifa de la luz. El P-LIB coincide en que el recibo debe reflejar el coste real. Actualmente el precio está muy lejos de la realidad, ya que el recibo incluye multitud de sobrecostes que poco tienen que ver con la producción de la energía, su transporte y distribución. Sirvan de ejemplo los siguientes: los incentivos al carbón, el plan de viabilidad de Elcogas, las primas al régimen especial o la moratoria nuclear. El P-LIB denuncia que es una mentira flagrante que la subida se deba a que pagamos menos de lo que cuesta la electricidad. En realidad se paga mucho más de lo que cuesta producirla, ya que el recibo enmascara incontables decisiones políticas pasadas y actuales que poco o nada tienen que ver con los costes reales. «El P-LIB desea que los costes reflejados en el recibo sean los reales de la producción, transporte y distribución de la luz», ha manifestado José María Rodríguez, miembro del Comité Ejecutivo Federal, «pero sobre todo apostamos por la liberalización real del sector, junto al fin de las subvenciones a determinados combustibles y de las limitaciones a otros».
Además, subir los precios más politizados, directamente controlados por el Estado, es una decisión profundamente estatalista que ahoga aún más a los ciudadanos y dificulta la salida de la crisis. El PP demuestra nuevamente que prefiere aumentar los ingresos estatales al precio que sea, con tal de no afrontar lo realmente necesario: el recorte drástico del gasto público y la consiguiente reforma económica tendente a la reducción del Estado, de su volumen y su carga fiscal para los ciudadanos y las empresas.