El Partido de la Libertad Individual (P-LIB) deplora la actitud impasible y distante del gobierno español ante el drama que vive Venezuela, y que ha producido ya varias víctimas mortales. El régimen totalitario de Nicolás Maduro ha renunciado incluso a las últimas apariencias democráticas al ordenar la detención de los líderes opositores, el endurecimiento de la salvaje represión policial y el intento de bloquear total o parcialmente infinidad de sitios web, blogs y servicios de comunicación online, como la subida de imágenes de las protestas a Twitter y otras plataformas. El P-LIB considera cobarde e insensible la reacción oficial española. Es una reacción intolerable cuando se trata de un país tan vinculado al nuestro, y contrasta con la honda preocupación de infinidad de españoles, y particularmente de canarios, con familiares, amigos o negocios en el país sudamericano. «Sospecho que algo tendrá que ver el contrato recién firmado por Repsol con la estatal PDVSA, controlada por el régimen comunista, para que Rajoy y Margallo guarden silencio», ha denunciado Juan Pina, Presidente del P-LIB, advirtiendo de que «Repsol ya se equivocó en Argentina y ahora lo va a hacer al invertir mil millones confiando en un régimen tiránico y moribundo». «Que no venga después Repsol a implorar el rescate de los contribuyentes españoles cuando pierda su inversión en Venezuela», ha añadido. «Rajoy aplica a la tragedia venezolana la misma política del avestruz que emplea ante cualquier otro asunto», ha señalado Pina, instando al gobierno español a «actuar con la máxima firmeza ante Caracas, llamando a consultas al embajador y expulsando de forma inmediata a su homólogo venezolano, como primera medida, y tomando a continuación la iniciativa en los organismos internacionales para aislar al régimen de Maduro y contribuir al esfuerzo inmenso de los venezolanos por librarse de la dictadura«. «Hoy los venezolanos se enfrentan ya físicamente al comunismo totalitario de su país, como en 1989 lo hizo toda Europa oriental, y la única posición digna que los demás podemos adoptar es ofrecerles sin reservas todo nuestro apoyo», ha afirmado, concluyendo que «resulta también muy significativo el silencio de los demás partidos políticos españoles ante hechos tan execrables».