El Partido Libertario (P-LIB) de Madrid está en desacuerdo con el cierre realizado la semana pasada por el Ayuntamiento de Madrid que encabeza Manuela Carmena de los restaurantes Los Gallos y Babelia en el callejón de Puigcerdá; y expresa su rechazo a los procedimientos seguidos.
Aunque el objeto de la disputa eran sólo las terrazas de los restaurantes y los cerramientos de las mismas, se ha precintado en un principio la totalidad de los restaurantes, requiriendo que los propietarios soliciten al Ayuntamiento la reapertura del interior de los locales. Además, este cierre se ha realizado de improviso, lo que ha llevado a la cancelación de reservas ya realizadas, y a la pérdida de negocio y trabajo en días de máxima actividad, ante la protesta de empleados de los restaurantes.
Los libertarios consideramos que la normativa municipal, así como la legislación sobre obras y construcción, deben simplificarse enormemente. Debe haber pocas normas, claras y sin contradicciones, que eviten decisiones discrecionales o arbitrarias del gobierno municipal que haya en cada momento; y que permitan una resolución rápida de cualquier conflicto cuando realmente haya algún perjuicio para otras partes. También debe la normativa descentralizarse, para dar mayor capacidad de decisión a los vecinos de cada barrio.
Es conveniente recordar además que la vigente ley anti-tabaco, que usurpa al propietario de cada local la decisión sobre si se permite fumar o no en él, ha dado como resultado en muchos casos un mayor uso de las terrazas, así como el cerramiento de las mismas de cara a los meses más fríos del año.
Héctor Muñoz, miembro de la ejecutiva madrileña del P-LIB ha declarado en relación a estos cierres: “Cuando una regulación va en contra de la creación de empleo y del emprendimiento, es nociva para los propios ciudadanos. Madrid merece ser una ciudad viva y no ser ahogada en un mar regulatorio”. Y añade: “La normativa actual acentúa conflictos entre hosteleros y vecinos al dejar en manos políticas la resolución de los mismos”.