El Partido Libertario (P-LIB) rechaza la propuesta de reforma legislativa del Gobierno, dada a conocer el pasado martes por su Vicepresidenta, Carmen Calvo, según la cual el consentimiento sexual expresado con hechos, de forma tácita, o simplemente con una fórmula diferente de un “sí” deje de ser legalmente válido en el caso de que la persona que dé dicho consentimiento sea una mujer.
En primer lugar, una medida de este tipo sería imposible de llevar a la práctica. No es cierto que el código penal de Suecia, que la vicepresidenta toma como modelo, requiera el consentimiento mediante un “sí” expreso, sino que indica que “a la hora de evaluar la voluntariedad, se tendrá cuenta si esta se expresó con palabras, hechos o de alguna otra manera”.